Este libro presenta el primer análisis sistemático de las relaciones entre el profesorado, los padres y los alumnos en el ámbito de la gestión de los centros de enseñanza. Constituye asimismo un estudio paradigmático del proceso de profesionalización de los grupos ocupacionales, de la sociología de las organizaciones formales, de la dinámica de la participación político-social y de las relaciones entre un servicio público y su clientela. A través del estudio detallado de la experiencia de nueve centros escolares, el autor examina las claves del abismo entre el discurso y la práctica de la participación, los motivos del escaso compromiso de todos los implicados, los factores de tensión entre las familias y la institución escolar y el conflicto entre las funciones de enseñanza y de custodia que recaen sobre ésta.