Este libro recoge tres estudios de caso en torno a tres innovaciones educativas llevadas a cabo durante el periodo de experimentación de la reforma. A partir de una recogida exhaustiva y detallada de evidencias basadas en observaciones en clase, análisis de materiales curriculares y las voces de los profesores, el alumnado, las familias y la administración, los autores construyen tres relatos etnográficos sobre cómo los miembros de la comunidad escolar interpretan las innovaciones que están llevando a cabo en sus centros. Estos estudios pueden contribuir a responder, entre otras, a las siguientes preguntas: ¿qué caracteriza y qué podemos aprender de las fases por las que pasa una innovación educativa? ¿Cómo perciben y llevan a cabo los centros las innovaciones promovidas por la Administración y las que son impulsadas por los propios docentes? ¿Por qué la Administración no toma en consideración el trabajo, las ideas y propuestas de los profesores cuando están promoviendo una reforma educativa y luego les responsabiliza de su fracaso? ¿Cómo acercarse a la realidad de los centros de enseñanza desde una perspectiva etnográfica y qué se puede aprender de ese acercamiento sobre la vida y las diferentes culturas de las escuelas?