El marco de la participación de las empresas y particulares en la actividad económica tiene, necesariamente, que estar presidido por la flexibilidad y por la adaptación a las reglas que precisa el mercado. De alguna forma son las exigencias de los operadores económicos las que demandan, al hilo de la flexibilidad organizativa, que se conformen estructuras variables con las que participar en la actividad económica y que no siempre pasan por las sociedades de capital. El presente libro trata de analizar una figura que, probablemente, ha pasado algo desapercibida en la vida social y económica, pero, en la que tras un análisis más detenido, puede decirse de ella que tiene una relevancia superior a la que se aprecia y, en todo caso, que puede cubrir un hueco real para la participación en la actividad económica sin la rigidez y la consolidación que exigen las sociedades de capital.
En las agrupaciones de interés económico existe, en puridad, una forma asociativa en la que participan entidades que tienen su propia esencia y estructura y que están operando ya en el mercado de una forma diferente caracterizada por su condición aislada y centrada en su concepción puramente individual. Desde esta perspectiva, se abordan, con una visión interdisciplinar y general, las peculiaridades que comportan la utilización de esta forma jurídica y su participación en la actividad económica, conscientes de que su análisis puede contribuir a situarla en el punto de equilibrio que implica su utilización, en términos de competencia y de ordenación del mercado.