¿Somos verdaderamente libres o esa libertad, ese libre albedrío del que presumimos no es más que una vana ilusión? Planteada incesantemente durante siglos, esta pregunta ha llenado miles de páginas de todo tipo de tratados, especialmente filosóficos, científicos y religiosos. Y todavía continúa atrayendo poderosamente nuestra atención. La diferencia es que ahora la neurociencia, esto es la ciencia cuyo objeto es estudiar el cerebro humano, posee unos recursos mucho más desarrollados que en el pasado. El fantasma de la libertad estudia la cuestión de si existe o no el libre albedrío humano desde la ciencia, su único hogar fiable. Su autor, Francisco J. Rubia, catedrático emérito de Fisiología Humana de la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense, es un distinguido especialista en neurociencia además de un magnífico expositor. Adversario riguroso del autoengaño, "deconstructor' de falsas creencias, el profesor Rubia sostiene que la ciencia del cerebro demuestra que uno de los mitos de los que la propia humanidad se ha dotado es el libre albedrío. Y para probarlo ha escrito este fascinante libro, en el que analiza funciones cerebrales que muestran hasta qué punto estamos equivocados cuando creemos que la consciencia es la que controla todas nuestras funciones cognoscitivas, cuando en realidad es una ínfima parte de la actividad del cerebro. Es curioso, nos dice, que no nos preocupe el que no controlemos conscientemente lo que almacenamos en la memoria y, sin embargo, supongamos que somos libres cuando tomamos una decisión, siendo la memoria biológicamente más importante que el libre albedrío.