El universo se mantiene en armonía gracias al equilibrio entre el mundo de la luz, en el que habitan los humanos, y el de las tinieblas, donde moran las bestias. Ambos planos quedaron separados en un remoto pasado por medio de un pacto, sellado al ver que los enfrentamientos entre ambas razas no cesaban. Sin embargo, el monarca absoluto entre las bestias cayó perdidamente enamorado de la reina humana. Le cedió a esta su espada y un nuevo acuerdo quedó cerrado: en el momento en que ella o sus descendientes se encontraran en peligro, el Rey de las bestias y su progenie acudirían en su ayuda. . . Sin embargo, tiempos turbulentos vuelven a asolar ambas tierras. . . Un hermoso guerrero -descendiente de la Reina Sagrada- y el altivo Rey de las bestias se cruzan en lo que parece un encuentro provocado por el destino. . . ¡Aquí comienza nuestra historia!