«El camino hacia la realización personal es difícil y continuo», insiste Jorge Bucay en cada uno de sus libros. Sobre esta serie de caminos, el popular escritor argentino ofrece unos mapas de territorio para que cada uno recorra el suyo propio a su ritmo y eligiendo el trayecto. «Ser feliz -afirma el autor- no es un derecho solamente, también es, de muchas maneras, una obligación contraída con la vida.» En El camino de la felicidad Jorge Bucay invita a plantearse una manera propia de vivir y a centrarse en lo que hace falta para encontrar esta felicidad que tanto se desea. Habla de la ilusión, el deseo, la acción y el desafío de intentar ser quienes somos de verdad. La felicidad está en manos de cada uno. Depende de una búsqueda personal e intransferible, una postura incondicional hacia la propia vida. En palabras del autor: «Ser feliz no quiere decir necesariamente estar disfrutando, sino vivir la serenidad que me da saberque estoy en el camino correcto hacia algo placentero, disfrutable, hacia algo que tiene sentido para mí». Para Jorge Bucay, como él mismo anuncia desde el principio, ser feliz no es un derecho, es una obligación.