Stan Laurel, el mítico «Flaco» de la pareja del Gordo y el Flaco, ya viejo y acabado, acude a Phillipe Marlowe (detective creado por Raymond Chandler), para que averigüe por qué ya nadie lo contrata. Pasado cierto tiempo, Laurel muere. Un Osvaldo Soriano convertido en personaje de ficción se encuentra a Marlowe frente a la tumba del cómico. A partir de este encuentro tendrá lugar la más disparatada y tragicómica serie de hechos, que combina llanto y risa, actores y personajes, realidad y ficción.