No hace falta ser un lince para darse cuenta de que Lara Lington no atraviesa un buen momento: su novio le ha dado esquinazo, su mejor amiga se ha largado a Goa y la empresa de cazatalentos que ha montado con ella se va al garete. Ya es hora de que algo le salga bien. Pues no. En plena tormenta existencial, aparece nada menos que el fantasma de su tía abuela Sadie, recientemente fallecida a la edad de 105 años. Con el aspecto y la marcha de una joven de los años veinte, Sadie la apremia para que recupere un misterioso collar desaparecido en extrañas circunstancias, sin el cual nunca podrá disfrutar en paz de su eterno descanso. Y aunque Lara intenta tomárselo con calma, la impulsiva Sadie la empujará a través de un alucinante y laberíntico enredo en el que se verán envueltos personajes como su repelente prima Diamanté, un estirado ejecutivo norteamericano y hasta la misma policía, que se pondrá a husmear ante la sospecha de un improbable asesinato. Así, a lo largo de este hilarante laberinto, Lara acabará convencida de que, si cuentas con la ayuda de un fantasma, al final las cosas siempre se arreglan.
Una chica años veinte es una de las novelas más originales de Sophie Kinsella, que con su desternillante humor se ha convertido en la autora más vendida del género en el Reino Unido, Estados Unidos, Italia y Francia.