«Un trabajo magistral» (Vanity Fair).«Strout ilumina tanto lo que entendemos de los demás como lo que comprendemos de nosotros mismos» (The New York Times).«El lector se encontrará pensando en este personaje conmovedor que es Olive Kitteridge incluso mucho tiempo después de haber terminado el libro» (Newsweek).«Como en Winesburg, Ohio, de Sherwood Anderson, esta novela en forma de cuentos nos cautiva por la humani-dad de sus personajes» (San Francisco Chronicle).Olive Kitteridge es una maestra retirada que vive en un pequeño lugar de Maine, en Nueva Inglaterra. A veces dura, otras paciente, a veces lúcida, otras abnegadamente ciega, Olive Kitteridge lamenta las transformaciones que han agitado el pequeño pueblo de Crosby y la deriva catastrófica que va tomando el mundo entero, pero no siempre se da cuenta de los cambios menos perceptibles que afectan a las personas más cercanas: la desesperación de un ex alumno que ha perdido las ganas de vivir; la soledad de su propio hijo, que se siente tiranizado por los caprichos irracionales de Olive; y la presencia de su marido, Henry, que vive su fidelidad conyugal como una maldita bendición. Mientras la gente del lugar va afrontando sus problemas, sean leves o graves, Olive Kitteridge va tomando conciencia de sí misma y de las personas que la rodean, muchas veces dolorosamente, pero siempre con una honestidad entrañable. Olive Kitteridge es un magnífico retablo de vidas. Elizabeth Strout describe con una gran precisión psicológica los desmanes de la condición humana.