El clan MacKendrick no sabe de luchas ni de armas. Lleva siglos cultivando las bellas artes y la artesan237;a, sin preocuparse de fortificaciones ni de protecci243;n. Pero ahora que su jefe ha muerto asesinado por el temible Roderic, s243;lo les queda una esperanza: el Lobo Negro. Ariella MacKendrick, como jefa de su clan, sabe que es la encargada de proteger a los suyos y tambi233;n sabe que s243;lo podr225; hacerlo despos225;ndose con un jefe valeroso que consiga el respeto de su gente. 191;Ser225; de verdad el Lobo Negro su 250;ltima esperanza? Ya solicitaron su ayuda una vez y s243;lo obtuvieron el silencio como respuesta. Pero en esta ocasi243;n est225; dispuesta a hacer cualquier cosa para lograr su ayuda, aunque para ello deba olvidar el orgullo y arriesgar su coraz243;n.
EL LOBO NEGRO
Hubo un tiempo en que Malcolm MacFane era conocido como el Lobo Negro, un jefe admirado y temido, respetado por su clan y por los clanes vecinos. Pero de aquel legendario guerrero s243;lo queda un cuerpo herido y un esp237;ritu atormentado. Malcolm lo perdi243; todo y se sabe responsable. Por eso no puede soportar la sola idea de que alguien le recuerde como el valeroso guerrero que fue, como el m237;tico Lobo Negro capaz de arriesgar su vida por las causas m225;s justas. Y mucho menos si quien se lo recuerda es un impertinente mozalbete con rasgos y formas demasiado parecidos a los de una mujer...
LA BELLA ARIELLA
Bajo su disfraz de hombre, Ariella observa el deterioro del Lobo Negro, un hombre con el cuerpo maltrecho y la mirada cargada de odio y dolor. 191;C243;mo es posible que fuese 233;l el escogido por su padre para desposarla y heredar el t237;tulo de jefe de su clan? Quiz225;s si pudiese acercarse un poco m225;s, descubrir237;a alguna cualidad oculta. Pero el Lobo Negro no debe nunca descubrir que es ella, Ariella MacKendrick, quien ha recorrido el pa237;s para solicitar su ayuda. A pesar de que una extra241;a fuerza parece, inevitablemente, acercarle a 233;l.