1949. Dos jóvenes músicos procedentes de Cuba llegan a Nueva York con sus instrumentos bajo el brazo. Instalados en casa de un familiar, los hermanos Castillo trabajan durante el día y dedican sus noches a la música. Pronto se convierten en las estrellas de las salas de baile, en las que su orquesta toca boleros, mambos, rumbas y chachachás, la música sensual y brillante que los convertirá súbitamente en Los Reyes del Mambo.
Oscar Hijuelos realiza un maravilloso retrato de los hermanos Castillo, sus triunfos y sus tragedias, y revive toda una era gloriosa en la música de origen hispano y en la vida norteamericana. Recuperando la Nueva York que habitaron sus padres, Hijuelos crea una fascinante y rica obra sobre la pasión y la muerte, la memoria y el deseo, y compone una inolvidable canción de amor a la vida misma.