Ambientada en la Francia de la segunda guerra mundial, Calle de la Estación, 120 es la primera novela de Léo Malet en la que aparece el detective Nestor Burma como protagonista.
Bob Colomer, ayudante de Burma, es asesinado en la estación de Lyon justo cuando acababa de reencontrarse con su jefe, recién llegado a Francia del campo de prisioneros alemán en el que había estado internado. Antes de morir, Colomer logra susurrarle una dirección: «Calle de la Estación, 120», la misma que Burma había escuchado en el hospital militar de un prisionero agonizante. A partir de ahí arranca una investigación en la que el detective tendrá que indagar en episodios de su pasado que ya creía enterrados y que le llevará de la Francia de Vichy al París ocupado por los nazis.
Publicada por primera vez en 1942, Calle de la Estación, 120 es una apasionante novela negra pero también una descripción de la vida cotidiana en Francia durante la segunda guerra mundial, en la que el racionamiento, la división del territorio y las restricciones impuestas por los nazis son el escenario para la presentación de uno de los personajes míticos de la novela policíaca francesa: el detective Nestor Burma.