En el jardín de Amílcar Barca, padre del legandario Aníbal, aparece asesinado un influyente mercader romano. Así comienza esta novela apasionante tejida entre Roma y Cartago, con derivaciones en Hispania, protagonizada por un joven militar romano, Tito Letilio Mucro que es enviado con poderes oficiales a Cartago para investigar el asesinato que parece salpicar la figura del prestigioso general Amílcar Barca.