De Helmut Newton puede decirse que es un fotógrafo de moda porque las imágenes que ha producido con una inusual fecundidad y un virtuosismo constante han dado lugar a las páginas más bellas de las revistas ilustradas más importantes. Pero Newton es mucho más que eso. Es un cronista meticuloso de una clase social que le fascina desde siempre, la de la gente rica. Esta atracción por el lujo y la belleza le han convertido en un testigo deslumbrado pero lúcido de un mundo del que capta las apariencias, de un mundo que pone al desnudo, en el sentido propio del término. La introducción es del conocido modisto Kart Lagerfeld. Contiene una autopresentación del fotógrafo, notas biográficas y bibliográfica, con las exposiciones más representativas y 61 fotografías en blanco y negro.