Desde los tiempos de la Ilustración disponemos de una metodología científica y del utillaje intelectual que nos permite establecer la veracidad o falsedad de afirmaciones científicas e históricas. Y sin embargo asistimos, consternados, a un alud de cháchara pseudocientífica que no resiste un análisis serio. Con la paradójica ayuda de la técnica -Internet--, millones de personas en todo el mundo "compran" las tonterías de los nuevos charlatanes.
Hay quien cree a pies juntillas que tras los atentados del 11 de septiembre de 2001 a las Torres Gemelas se encuentra el gobierno de los Estados Unidos (el documental que lo sostiene, Loose Change, fue visto en Internet por cien millones de personas en todo el mundo); que las iglesias ocultan la verdad de que Jesús y María Magdalena engendraron una dinastía de reyes merovingios; que el SIDA fue inventado en un laboratorio de la CIA; que el MI5 tuvo que ver con la muerte de la princesa de Gales; que los alienígenas han manipulado nuestro ADN o que hubo una civilización en Marte; que el mundo tiene 6.000 años o que la estructura de una célula es demasiado compleja para haberse desarrollado por selección natural...
Es urgente despertar a la razón de su somnolencia, porque todos estos camelos -y otros muchos que Damián Thompson nos cuenta-- no sólo están creando una generación global de papanatas, sino que alimentan el nacionalismo y el racismo y pueden conducir a nuevas tensiones económicas, políticas y sociales.
"Las pocas horas que le lleve leer este libro apasionado, irritado, ingenioso y sabio estarán bien invertidas. Se divertirá un montón y al mismo tiempo se armará hasta los dientes contra tanta charlatanería como campa por sus respetos y contra quienes permiten que prospere".
Raymond Tallis