Park So-nyo se ha perdido en la bulliciosa estación central de Seúl cuando iba a visitar a sus hijos a la ciudad. Un instante de distracción de su marido y la gran aglomeración allí reunida fueron suficientes para que la pareja se separara y fuera incapaz de volver a encontrarse.A partir de ese momento, la búsqueda desesperada por parte de sus hijos se convierte también en una indagación en los recuerdos familiares. A través de las diferentes voces de su marido e hijos, que desvelan culpas y temores, se dibuja el retrato de una mujer humilde, campesina abnegada, cuyos sacrificios han quedado siempre en segundo término y que ahora, cuando ya no está, revelan su gran dimensión humana. Como un pájaro o una sombra, la presencia de Park So- nyo sobrevuela cada una de las páginas de esta novela llena de emoción para convertirla en un elogio sublime de los lazos familiares y la figura materna. «Damos por descontado que nuestras madres están a nuestro lado para ayudarnos de forma incondicional, y que siempre estarán ahí. Pensamos que han nacido para ser madres. Pero antes fueron niñas, y mujeres, como lo somos nosotras ahora. Con este libro quería dar voz a todas esas mujeres.» Kyung-sook Shin