Una de las dos Españas
ha de helarte el corazón.
Antonio Machado
El día de su
muerte, Julio Carrión, poderoso hombre de negocios cuya fortuna se remonta a
los años del franquismo, deja a sus hijos una sustanciosa herencia pero también
muchos puntos oscuros de su pasado y de su experiencia en la Guerra Civil y en
la División Azul. En su entierro, en febrero de 2005, su hijo Álvaro, el único
que no ha querido dedicarse a los negocios familiares, se sorprende por la
presencia de una mujer joven y atractiva, a la que nadie había visto antes y
que parece delatar aspectos desconocidos de la vida íntima de su padre. Raquel
Fernández Perea, por su parte, hija y nieta de exiliados en Francia, lo sabe en
cambio casi todo sobre el pasado de sus progenitores y abuelos, a los que ha
preguntado sobre su experiencia de la guerra y del exilio. Para ella sólo una
historia permane-ce sin aclarar: la de una tarde en que acompañó a su abuelo,
recién regresado a Madrid, y visitaron a unos desconocidos con los que intuyó
que existía una deuda pendiente.
Álvaro y Raquel están condenados a
encontrarse porque sus respectivas historias familiares, que son también la
historia de muchas familias en España, desde la Guerra Civil hasta la
Transición, forman parte de sí mismos y explican además sus orígenes, su
presente. También porque, sin saberlo, se sentirán atraídos sin remedio.
Con El corazón helado Almudena Grandes nos entrega sin duda su novela
más ambiciosa, en la que traza a través de dos familias un panorama emocionante
de la historia reciente de nuestro país,
y también del conflicto de las nuevas generaciones con la memoria.
Más información en: www.almudenagrandes.com