El juicio de Giorgio Raimondo Cardona de que «la escritura puede ser todo aquello que nosotros seamos capaces de leer en ella» confirma toda su profética veracidad en los ensayos reunidos en este volumen, dedicado a la historia de las prácticas del escribir y del leer. Como en toda Europa, esta disciplina está encontrando también en España una atención creciente entre historiadores, paleógrafos, antropólogos sociales, filólogos y lingüistas, entre otros.
A la luz de estas páginas, el tiempo de Cervantes marca un paso adelante en la afirmación de la lógica de la escritura como tecnología de organización y vertebración social, un salto cualitativo en la lenta mutación que se venía produciendo desde los aledaños del siglo xii, desde una cultura esencialmente oral a otra marcadamente escrita. Partiendo del aumento de la alfabetización en los siglos xvi y xvii, los diversos ensayos de este volumen exploran los usos políticos, privados, contestatarios y mágicos del escrito; la relación entre las formas de la escritura y los niveles de educación y cultura gráfica, las múltiples maneras de leer y el distinto sentido de la lectura entre el público erudito y las clases subalternas, considerando también la importancia que, en la transmisión y apropiación de los textos, tuvieron tanto las variantes formales del libro impreso como el uso de ilustraciones. Asimismo, se considera la escritura y la lectura desde la perspectiva del género, indagando en las singularidades de la aproximación femenina a la cultura escrita.
Desde una óptica interdisciplinar, este libro recorre la pluralidad de aspectos de la denominada «civilización escrita» y por ello resultará de gran interés.
Contribuyen a este volumen: Antonio Viñao Frago, Fernando J. Bouza Álvarez, Rita Marquilhas, James S. Ameling, Francisco M. Gimeno Blay, María del Mar Graña Cid, Roger Chartier, Victor M. Minguez, Elisa Ruiz García, José Manuel Prieto Barnabé y María Cruz García de Enterría.