Una de las causas del abismo humano y del agotamiento medioambiental que padecemos es la forma de vida insensatamente consumista de las sociedades desarrolladas. Se impone por tanto un cambio en nuestro estilo de vida occidental y para ello se propone aquí un medio: comunidades de vidas consagradas a explorar, poner en práctica y extender un estilo de vida desarrollado que sea sostenible y solidario, a la vez que saludable y espiritual, desde una pasión común por el Creador, por sus criaturas y por la creación.
Una comunidad fraterna de buscadores de Dios que vivan su vida y su misión desde estos parámetros podría ser, para la Iglesia y el mundo, un brote nuevo de una especie aún por identificar, un estilo de vida para otro mundo posible.
José Eizaguirre, religioso marianista, estudió Arquitectura y Administración de Empresas. Es el promotor de la campaña de solidaridad "Cuaresma, cuarenta días con los cuarenta últimos" y autor de diversos artículos sobre ecología, consumo y vida religiosa. En los últimos años ha prestado diversos servicios a la Vida Consagrada como administrador y consejero económico.