En este libro, la autora desarrolla su concepción del juicio reflexionante inspirada en Emmanuel Kant y en Hannah Arendt para concentrarse en cómo cierto tipo de narraciones modelan nuestras nociones de lo que consideramos moral. Lara nos ofrece distintas concepciones sobre el mal en su formulación histórica mediante los ejemplos de las tragedias griegas, las diferentes concepciones sobre el mal en la obra de Shakespeare, el uso literario de la metáfora en la obra de Joseph Conrad y en narraciones fílmicas que describen la crueldad humana. Lara sugiere que el aprendizaje moral es un proceso en el que intervienen las instituciones sociales, la voluntad de los individuos y de las sociedades para comprometerse a un debate abierto y con ello modelar los juicios colectivos sobre el pasado.
Lara enfatiza que el juicio reflexionante se da entre un evento, una narración de dicho evento y la recepción pública de dicha narrativa. En este libro se aportan importantes métodos para la comprensión del fenómeno moral del mal, porque introducen nuevas verdades desvelatorias acerca de eventos particulares que no pueden ser simplemente captados por medio de categorías conceptuales. Lara utiliza como fuentes a Jürgen Habermas, Walter Benjamin, Primo Levi, Giorgio Agamben y Ariel Dorfman para probar la conclusión de este tipo de narraciones: la acción (de crueldad) ata de manera definitiva al perpetrador con su víctima.