Clifford Geertz, uno de los antropólogos más influyentes de nuestro tiempo, discute en este libro algunos de los más acuciantes problemas a los que se enfrentan los intelectuales hoy en día. En esta colección de ensayos, tan personales como reveladores, explora la naturaleza de su trabajo antropológico y se constituye en portavoz de su generación, la que salió a escena después de la Segunda Guerra Mundial. Sus reflexiones, escritas en un estilo a la vez ameno e informal, transmiten al lector temas que van desde el relativismo moral hasta la relación entre las diferencias culturales y psicológicas, desde la cultura de la diversidad hasta el “conflicto étnico” en la política actual.
Geertz, que en un principio consideró desarrollar su carrera en el entorno de la filosofía, comienza explicando cómo se deslizó hacia el movimiento revolucionario de la antropología simbólica. Su orientación filosófica, no obstante, le ayudó a enmarcar el papel de la antropología en amplios círculos intelectuales y a acercarse a la obra de pensadores tan relevantes como Charles Taylor, Thomas Kuhn, William James y Jerome Bruner. En este libro, Geertz discute con la obra de estos autores en tanto explora cuestiones relativas a la filosofía política, la psicología y la religión, temas que le han intrigado desde siempre y que ahora, a la luz del pensamiento posmoderno y del multiculturalismo, adquieren especial relevancia para él. El texto ofrece debates penetrantes sobre conceptos tales como la nación, la identidad, el país o el yo, a la vez que nos recuerda que sus significados no están categóricamente fijados, sino que se desarrollan y cambian a través del tiempo y del espacio.