Uno de los mayores especialistas en la Iglesia primitiva y la figura de Jesús, el profesor Bart D. Ehrman, nos ofrece en este libro, sostenido por una erudición asombrosa, un fascinante análisis de los credos cristianos que pudieron ser y no fueron, de las luchas de poder en el seno de la Iglesia primitiva y de cómo los vencedores de esas luchas impusieron la adopción final de sus ideas que, recopiladas más tarde en los libros canónicos del Nuevo Testamento, acabaron constituyéndose en el credo -uno de los muchos posibles- que aún hoy recitan los cristianos en la misa.