Noche de difuntos de 1728. En un caserón solitario de la costa de Nueva Inglaterra, el anciano Thomas Tew, famoso capitán pirata a quien todas las crónicas dan por muerto en una acción de abordaje en los mares de Arabia, recibe la visita de un extranjero, Agag Riddilimpore, oriundo de Badagara, que dice ser hijo natural del capitán Misson, el que fuera fundador de la mítica república de Libertalia?
Esta que tienes en tus manos, lector, es la historia de una búsqueda. Es, también, la historia de una utopía y de los grandes viajes y aventuras que corrieron sus fundadores. Pero es, sobre todo, el sueño libertario de un puñado de hombres ?piratas? que creyeron firmemente en la posibilidad de hacer de su mundo un mundo mejor: libre, justo, igualitario, fraternal y tolerante.