La conquista musulmana de la Península motivará que la evolución política de la España medieval presente como un rasgo muy significativo lo que será todo un proceso de configuración de diversas realidades territoriales que, si diferenciadas políticamente, no dejarán de mantener entre ellas una especificidad de relaciones. Así, junto a la emergencia de la institución monárquica como factor de encuadramiento político, como realidad común que se irá imponiendo, esta dinámica política se desarrollará directamente vinculada al proceso de compleja configuración social de una diversidad de territorios cuyos rasgos peculiares, en los diversos aspectos del devenir histórico, han tenido larga proyección más allá de su evolución medieval.