La historia de América es mucho más reciente que la europea, y por ello no reviste aún su complejidad, siendo posible identificar un escaso puñado de sucesos estratégicos, definitivos para la conformación del continente.
El primero y más conocido, su "descubrimiento" por Cristóbal Colón, solo escuchado por los Reyes Católicos en esa Europa que emergía de la Edad Media. Más tarde la historia de América se frena o acelera, según las épocas. Es vertiginosa en la "conquista", plagada de épica y con nombres para la historia como Cortés o Pizarro. Es lenta y sostenida en la fase de "colonización" española, cuando en el devenir de tres siglos España desliza los patrones culturales que hoy definen a la América hispana: la lengua, la religión, las costumbres, la filosofía de la vida, el ganado y su manejo a caballo, los cultivos agrícolas, la arquitectura... O cuando el mundo anglosajón penetra tímidamente por el Este, para terminar apoderándose directa o indirectamente de las Américas.
Más tarde se acelera de nuevo en la vorágine de la "emancipación", cuando se desvincula violentamente de las potencias europeas y nuevos nombres irrumpen en el magno escenario, como los de Bolívar, San Martín o Washington. Y por fin, la "independencia", que tantas esperanzas había concitado y que en una parte de América se cumplieron y en otra se frustraron, arrojando un saldo muy distinto al que imaginaron los libertadores.
"Momentos estelares de las Américas" es la historia del continente a partir de sus episodios cruciales, aquellos hechos que fueron hijos del valor, el azar, la codicia o la tenacidad, y que definieron los perfiles de la América que hoy conocemos.
