El gordo y rico señor Aristóteles tenía tanta panza que los botones de la camisa estaban a punto de saltar. Y, efectivamente, pasó lo que tenía que pasar y por eso se explica que en este cuento aparezcan, entre otros, un caballo, un marqués, una novia, un tenderete de fruta, un barco, tres embajadores y un cigarro habano agujereado; y que casi se inicie una guerra mundial... ¡de risa!