Homer Simpson ha conseguido una franquicia de la cadena Krustyburger. Sin pensárselo dos veces, deja su trabajo para dedicarse de lleno a su nuevo negocio, lo que alegra a Bart pero no a Lisa, que está en contra de la comida basura.
Desgraciadamente, a Homer las cosas no le irán como pensaba, y tendrá que cambiar de ocupación. En este álbum Homer y Bart también irán de pesca juntos. Lo que Bart pensaba que sería un aburrimiento insoportable hará que padre e hijo se acerquen cuando todo hacía suponer lo contrario.