Esta historia no comienza con «Érase una vez», aunque podría ser así. Érase una vez Biel y su panda, que recibían avioncitos de papel con mensajes amenazantes y se morían de miedo de que les pegaran después de clase. ¿Quién? Pues la panda rival en la que además del jefe, conocido con el nombre del Bola, y su temible barriga, había dos gemelos amaestrados, con personalidad y apellido de pit bull. En medio de la pelea aparece un esqueleto que desaparece para convertirse en actor de teatro. También hay un abuelo comerciante y mago, un profesor que convierte la clase en un espectáculo y una bicicleta algo tímida a la que le encanta filosofar.