Con una belleza extraordinaria, Una sola muerte numerosa nos pone en contacto con esos lugares de la experiencia humana más difíciles de entender y procesar: el dolor extremo, el deseo de aniquilación del otro, la incomprensión ante eso que llamamos maldad absoluta, la indiferencia ante el sufrimiento, la pérdida traumática de seres queridos, el desarraigo. Y sin embargo, de la mano de Strejilevich también entramos en el territorio de la ternura, del amor, de la ironía e incluso del humor, de la solidaridad, de la resistencia y la supervivencia.
"Desde 1975, todo mi país se transfiguró en una sola muerte numerosa que al principio parecía intolerable y que luego fue aceptada con indiferencia y olvido." Tomás Eloy Martínez.
Esta es la crónica de esa transfiguración, un relato fragmentado que narra la experiencia y su recuerdo, la herida y su cicatriz. Es un libro sobre el dolor inmediato –de la tortura, del secuestro, de la reclusión– y sobre el dolor prolongado –de la desaparición y muerte de seres queridos, del exilio, del olvido y de la impunidad.