Una niña, un niño. Dos realidades, dos paletas de color. Y una doble página para compartir.
¿Pero qué pasa si un día uno de ellos se aventura a entrar en la página del otro?
Este será el punto de inflexión, el inicio de una batalla de sobre la hegemonía del color y del espacio.
Un álbum hecho a 4 manos, donde el registro visual del gran Ignasi Blanch dialoga con la vital Anna Aparicio, haciendo dialogar así también a los dos vecinos protagonistas. Todo, para hacernos reflexionar sobre el hecho de compartir la vida.
Una pequeña joya coronada con un magnífico texto a cargo de Àngel Burgas.