Tras un emocionante desenlace anterior, Akiyama logra imponerse en la segunda fase del Liar Game y decide seguir adelante. Gracias a ello, Nao, que había sido eliminada en el transcurso de la partida, consigue 40 millones de yenes, una cantidad nada despreciable. Incapaz de hacer nada, pasa los días carcomida por los remordimientos de conciencia hasta que recibe una carta en la que se explica que se va a organizar una repesca. Con la idea de hacerse con el premio y lograr, así, ser de alguna utilidad para Akiyama, Nao decide presentarse sola en el lugar de la reunión.
Allí se encuentra otras ocho personas, todas ellas eliminadas durante la segunda partida. En esta ocasión, solo habrá un perdedor por lo que, a priori, parece algo sencillo. Sin embargo, no todo está tan claro.