Con la expresión 'más allá del posthumanismo' se quiere significar, en primer lugar, la conveniencia de superar la dicotomía entre humanismo y posthumanismo generada precisamente por el debate en torno a este problema. En efecto, no parece razonable resignarse a que el hombre haya de morir, ya sea por rebasamiento, ya por rebajamiento. Entre los dos extremos queda suficiente espacio para que los humanos puedan seguir viviendo. En segundo lugar, se dirige la mirada a las antropotécnicas. Aplicadas a los humanos, las tecnologías biomédicas y cibernéticas son antropotécnicas. Pero no son las únicas. Hay otras antropotécnicas con una dilatada historia de miles de años. La lectoescritura representa un ejemplo especialmente significativo. El libro se hace eco de las voces que advierten del peligro que las tecnologías digitales, y muy particularmente Internet, en estrecha conexión con las versiones más radicales del posthumanismo, hacen correr a aptitudes como la atención profunda y que ponen en riesgo la subsistencia misma de la filosofía.