La vida se le hizo bola y echó por el atajo en busca de la solución más fácil. Pero la muerte, con su frío hocico de gárgola de catedral, venía con prisas, tenía cosas más importantes que hacer, por lo que se ve, y pasó de largo sin teñir de rojo su guadaña. El destino le tenía otros planes reservados, al chaval.Dos relatos hilvanados con el hilo de la libertad. En el primero, Divergentes, con lenguaje fresco y atrevido, se ponen de manifiesto dos de las peores lacras que corroen los pilares de la sociedad vigente, el acoso escolar y la homofobia, tratando de forma transversal otras cuestiones, igualmente importantes y de actualidad, como la automedicación y el peligro que supone el mal uso de las nuevas tecnologías. En el segundo, Nació para volar, basado en un hecho real y con estilo diferente, muy cercano al lenguaje poético, se ensalza el valor de la libertad en la vida de los animales, a la vez que se pone de relieve el problema, tan grave como triste, de la España vaciada y la minusvaloración del mundo rural.