«No quería terminar esta novela. Sabía que mientras leyera esos personajes seguirían conmigo, que tendrían alguna oportunidad. Pero al acabarla me di cuenta de que seguían ahí, al otro lado de la ventana, y que también me estaban observando. Me ha emocionado mucho.»
ZAHARA «Toda nuestra existencia de personajillos de ciudad se podría condensar en cualquiera de los cuadros de Hopper. El miedo, la esperanza, el vacío y esa continua necesidad de que pase algo que lo cambie todo. Son como ventanas en la noche en las que asomarme a otras vidas que al final también son las nuestras.» Pablo llega a Madrid para empezar de cero y cumplir su sueño de ser actor. Siguiendo esa continua necesidad de que pase cualquier cosa que lo cambie todo, se convierte en un «gastaaceras» de tanto patear la ciudad y relacionarse con la extraña fauna que la puebla. Dos personajes serán decisivos para su futuro: Elia, una segurata del museo Thyssen, fascinada por el pintor americano Edward Hopper, y... el fantasma de Pío Baroja. Con su primera novela, Carlos Langa se presenta como un autor cargado de talento e inteligencia. Melancólica, cómica y emotiva a partes iguales, ha escrito una original obra para todo aquel que disfruta con la buena literatura y las historias de amor diferentes. Como después de mirar un cuadro de Hopper, el lector no volverá a ver la ciudad y a sus habitantes de la misma forma tras leer esta obra.