"Váyanse a casa, aquí no hay nada que ver" atrapa como el mejor thriller. Hay algo en sus páginas que sorprende de principio a fin, y no es fácil descubrirlo, es más bien una sensación, como la humedad del mar pegada al cuerpo. Su autor parece tener diferentes rostros; intuimos el terror desnudo de Stephen King, el horror cósmico de H.P. Lovecraft o la ficción transgresiva de
Chuck Palahniuk.
Un mundo donde lo psicológico y la violencia se confunden, cuentos oscuros en escenarios cotidianos y reconocibles con personajes desubicados, encerrados en estas páginas, que esperan
tu veredicto.