Partiendo de un análisis conceptual del poder, el libro se adentra en su relación con la comunicación y el periodismo como fórmulas de imposición hegemónica y los peligros para la profesión. Se indaga así en los orígenes del filantroperiodismo como un nuevo escenario laboral para los informadores que han recurrido al dinero de fundaciones públicas y privadas o a la ayuda de los donantes para sobrevivir. La existencia de esta nueva filantropía, donde se dan cita Bill Gates, George Soros, Mark Zuckerberg y Pierre Omidyar, entre otros, encuentra un aliado importantísimo en los medios de comunicación, que operan como herramientas de legitimación social de los superricos. Pero el periodismo también se ve asediado por otra parte del poder que se sitúa fuera de la legalidad y que llega hasta el crimen organizado, la corrupción, el narcotráfico o el terrorismo de Estado. Las amenazas, para aquellos profesionales que se atreven a contar esta realidad en la sombra, terminan traduciéndose en acoso, presiones o incluso asesinato. Por ello, en la obra también se desarrolla un análisis de la situación de estos periodistas, desde México a la India, pasando por Rusia, Arabia Saudí o la propia Unión Europea, deteniéndose en casos propios como los de Daphne Caruana o Jamal Khashoggi. Esta revisión sobre el estado de la profesión incluye, además, los puntos de vista y las opiniones de informadores de diferentes lugares del mundo en relación con el poder, el periodismo y la resistencia, destacando testimonios como los de Stéphane Horel, una de los artífices de la famosa y premiada investigación Monsanto Papers.
Periodismo SOS es, pues, una reflexión necesaria y una llamada de atención obligatoria sobre los riesgos de una profesión en peligro debido a las numerosas y variadas formas a través de las que el poder intenta someter el libre ejercicio de la labor informativa.