Unión Española de Explosivos hace un recorrido por la historia de la empresa Unión Española de Explosivos, que nació en 1872 por impulso del descubridor de la dinamita, Alfred Nobel, y que en sus inicios recibió el nombre de Sociedad Española de la Dinamita. Su origen fue consecuencia del deseo de Nobel de fabricar dinamita en España, donde previó una importante demanda de este producto y registró su patente. Llegó a considerarse una de las empresas más importantes del país.
La historia llega hasta nuestros días, en los que la compañía heredera del núcleo empresarial que se inició en el año indicado, ahora llamada MAXAM, está presente en la fabricación y venta de explosivos en más de cincuenta países. A lo largo de este período tan prolongado, la empresa ha tenido una importante presencia en sectores estratégicos próximos a la industria de los explosivos, como la química y la armamentística, pero también ha diversificado su negocio con actividades tan dispares como la minería del cobre o los proyectos inmobiliarios. En esta trayectoria la compañía ha pasado por momentos críticos, en los que su propia supervivencia ha estado en duda. Actualmente constituye un grupo empresarial compuesto a su vez por 140 sociedades filiales a lo largo de todo el mundo.