"«Se acerca el fin del mundo: preparaos». Las estaciones del que va a ser el último año del
universo se suceden ante los ojos de una adolescente de trece años. Su vida cotidiana gira en
torno a la Biblia (estudiar sus textos, asistir a la reuniones en el templo y predicar en las calles),
pero ella, atrapada entre el desprecio hacia «el mundo», que su comunidad percibe como ajeno
y amenazador, y los embates de la pubertad, comenzará, con la ayuda de un diccionario, a
hacerse preguntas sobre su forma de vida. La novela explora las extraños regocijos de los elegidos de Dios, y, a través de la cándida
voz de la protagonista, nos habla de las obsesiones y temores propios de la condición humana,
pero también acerca de la capacidad de escapar de una vida sin esperanza. Labastie se adentra, con tanta audacia como lucidez, en la difusa frontera que separa (o
aproxima) fe y locura."