En otoño de 1965, la cantante de blues Willie Mae «Big Mama» Thornton hace una gira por Europa con el American Folk Blues Festival. En cinco semanas recorre ciudades como Berlín, Copenhague, Estocolmo, Bruselas, Amsterdam, Dublín, Londres, París y Barcelona. La acompañan, entre otros, los músicos John Lee Hooker, Buddy Guy, Walter «Shakey» Horton y JB Lenoir. Una chica sin suerte sigue a la salvaje Big Mama Thornton en esta gira en la que se descubre el pulso cambiante de los contradictorios años sesenta. De fondo, la lucha de los afroamericanos por los derechos civiles, la guerra en Vietnam, los movimientos contraculturales y las drogas. Todo a ritmo de blues, una música nacida de la pobreza y de la resistencia.
«Soy gorda. Y negra. Pero valgo más que todos vosotros, bastardos. Nunca nadie me enseñó nada. Nunca fui a la escuela de música ni nada parecido. Si escucho un blues que me gusta, intento cantarlo a mi manera. Siempre es mejor hacer las cosas a tu manera. Mi forma de cantar viene de la experiencia. De mi propia experiencia. De mis propios sentimientos. No canto como nadie excepto como yo misma».