ESPEJOS PARA UNA CORTE es una novela coral cuyo inicio parte de una maniobra de espionaje: aquella llevada a cabo por Francia para sacar de la isla de Murano el secreto de la fabricación de los espejos. A partir de aquí, el argumento prosigue entremezclando tramas diversas que perfilan el retrato poliédrico de la Francia de Luis XIV. Un recorrido en el que política, guerras, diplomacia y artes irán transitando por una tramoya oscura de corrupción y asesinatos. Una realidad compleja en la que los espejos sirven como metáfora para volcar sobre el espectador una mirada múltiple, que intercala la realidad de Francia y la Europa occidental con su reflejo a través de un rey, una corte y unos intereses que dominaron la segunda mitad del siglo XVII. Una hoguera de vanidades en la que el lujo y los modales se alternan con crímenes abyectos. El anverso y reverso de un espejo en el que se recoge la imagen de los tiempos del rey Sol.