En este divertido libro, Drácula, el Yeti, fantasmas y ogros piden ayuda al detective londinense Sherlock Holmes, a su inseparable amigo, el doctor Watson, y a su perro Toby, para que resuelvan unos casos de lo más alucinante.
Para ayudar convenientemente al detective, el libro pone a prueba el talento investigador del lector que, con la ayuda de una lupa filtrante y una rueda de descodificación, debe resolver 50 enigmas en forma de: juegos de observación, crucigramas, jeroglíficos, mensajes secretos y enigmas visuales.
Hay que deducir, calcular, descodificar, adivinar... en resumen, usar el cerebro para recoger los indicios, eliminar las pistas falsas y resolver estos 10 fantásticos casos.