ASTRID, la heredera de Thule, último bastión vikingo del siglo XII ha pasado cinco años en el harén de Acre, tras ser raptada siendo niña en los jardines del Castillo de Thule.
Los Regentes que ordenaron su secuestro y asesinato gobiernan desde entonces la isla con mano de hierro y forma tiránica, tras disolver el Consejo del «Thing». Pero después de seis años, el regente Fridtjof y su mujer Nora (prima de Astrid) ven con asombro como la princesa perdida regresa en barco junto con dos guardaespaldas cruzados, Audaz y Guzmán.
Los Regentes se niegan a entregar la corona, amparándose en la poca experiencia de la princesa como gobernante, y usan el poder del Ejército (en manos de Fridtjof) para retener a Astrid, su familia y amigos en el Castillo, mientras planean el asesinato de todos ellos.
En el momento más inoportuno, un Dios Hindú, Arjuna, teleporta a Astrid, Audaz y Guzmán, junto con un joven Cátaro de la Occitania francesa, hasta la India, para que le sirvan como adalides en su guerra contra el Dios Kartikeya.
La lucha será encarnizada y desigual. Mientras, en Thule, los Regentes afianzan su poder.