DONALD WOODS WINNICOTT (1896-1971) es una de las figuras centrales del psicoanálisis tras la labor pionera de Sigmund Freud. De formación médica, se especializa en Pediatría y Psicoanálisis, tareas que ejerce simultáneamente a lo largo de toda su trayectoria, llegando a convertirse en uno de los referentes principales del psicoanálisis y la psiquiatría infantil de su época. Durante dos periodos (entre 1956-1959 y 1965-1968) es presidente de la Sociedad Psicoanalítica Británica, y miembro del grupo intermedio. Básicamente, es el psicoanalista que pone en valor la influencia ambiental (materna) en el desarrollo emocional temprano del bebé. Su tesis central es: «El bebé no existe, lo que existe es la pareja de crianza».
Sus intereses teórico-clínicos abarcan, preferentemente, a los pacientes borderline, esquizoides y psicóticos, la clínica infantil, la problemática adolescente, la tendencia antisocial y los trastornos psicosomáticos. Entre sus conceptos principales se encuentran los objetos y fenómenos transicionales, la madre suficientemente buena, la capacidad para estar a solas, la capacidad para preocuparse por el otro o concern, la preocupación maternal primaria, el gesto espontáneo, el verdadero y el falso self, el uso de un objeto? Además, desarrolla las modalidades de la consulta terapéutica y del psicoanálisis a demanda, y crea el juego del garabato o squiggle. Su labor clínica se centra en la capacidad de jugar como indicador de salud, donde destaca la riqueza psíquica. En su tarea privilegia el sostén del paciente sobre la interpretación, y considera que el tratamiento se da en la superposición de dos zonas de juego: la del paciente y la del terapeuta. En una zona intermedia o tercera zona, la del espacio transicional, en la que dos personas juegan juntas, «tratando de transformar en terreno de juego el peor de los desiertos».
Winnicott es un autor que hace de la paradoja, el jugar, la creatividad y el espacio transicional el hábitat de su teoría. Entre sus libros destacan: El niño y el mundo externo, El proceso de maduración en el niño, Escritos de pediatría y psicoanálisis, La familia y el desarrollo del individuo y Realidad y juego. Su dedicación al conocimiento de la vida infantil y adulta le convierte por derecho propio en un estudioso de la naturaleza humana. Su lema es: «En verdad que somos pobres si solo estamos cuerdos».