Desde que la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobara en septiembre de 2007 la Declaración sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, se han venido sucediendo diferentes pronunciamientos en los que se reclama una efectiva aplicación del derecho de autodeterminación. Sin embargo, el derecho de autodeterminación no sólo es una reivindicación de los pueblos indígenas o de las minorías, sino también de los Estados, que lo han utilizado para reivindicar fronteras, territorio y unidad territorial y política.