Bitcoin avanza a pasos agigantados por el mundo. Satoshi
Nakamoto, su creador, sigue siendo una personalidad enigmática
y criptográfi ca, pero el mito que rodea su posible riqueza,
no pasa desapercibido para la mafi a. Tampoco para los intereses
de los servicios secretos, no en vano, agentes de la NSA
llevan tiempo tras él. Las oportunidades que la criptomoneda
ha abierto en el mundo del dinero ha logrado que Nakamoto se
convierta en un héroe admirado en, cada vez, más rincones del
planeta. Harían cualquier cosa para defenderle. Y es que, para
muchos, que la gestión de las transacciones monetarias y la
emisión de bitcoins sea llevada a cabo sin intermediarios y de
forma colectiva en la red es, sencillamente, el principio de un
mundo más libre. De un mundo mejor.