El autor narra las vicisitudes de un joven uruguayo, Irineo Salbo, que llega a París, tras haber ganado un concurso literario con una novela plagiada. En su lucha por sobrevivir, se presta a pruebas como cobayo en laboratorios franceses que terminarán perturbando en muchos aspectos su percepción de la realidad. Novela de aventuras urbana, con toques de mágica o fantástica por lo surrealista de algunas situaciones, seres imaginarios y excentricidades de algunos personajes pero que se pueden acabar asumiéndolas como reales.
Con un gran número de descripciones impecables tanto de situaciones, espacios y personas, es una novela de fácil lectura, muy dinámica y con un vocabulario muy rico.