La evangelización de los distintos grupos étnicos que constituían el Virreinato de la Nueva España fue una labor desarrollada durante todo el Quinientos por tres órdenes de frailes medicantes: Franciscanos, Dominicos y Agustinos. Para materializarla se concibió y desarrolló una tipología arquitectónica nueva que hemos denominado "Arquitectura de la Conversión", formada por cuatro unidades constructivas básicas: atrio, capilla abierta, capillas posas y cruz de piedra.
Esta arquitectura se caracteriza por la unión de elementos culturales procedentes del mundo indígena y del mundo hispano occidental, convirtiéndose de esta forma en la aportación más emblemática del arte mexicano a la historia del arte universal.
La presente obra es un estudio de esta arquitectura planteado desde una doble perspectiva. Por un lado, desde un punto de vista genérico, insertándola dentro del marco histórico y artístico en el que se desarrolló. Por otro, desde un enfoque específico, analizando sus usos y funciones, evolución y antecedentes de los elementos constructivos que la constituyen.
Con este estudio hemos podido constatar la importancia que esta " Arquitectura de la Conversión" adquirió en Nueva España como instrumento para la evangelización de los naturales, pues fue una tipología pensada y utilizada de forma exclusiva por y para ellos.