Las Fuerzas Armadas asumen el cumplimiento de los compromisos derivados de los acuerdos internacionales sobre defensa suscritos por España con los Estados aliados y de la voluntad del Gobierno de la nación de colaborar con Naciones Unidas en el mantenimiento de la paz en el mundo. Este es el fundamento de las misiones en el exterior de las Fuerzas Armadas. Las misiones en Nicaragua, Kurdistán iraquí, Bosnia, Kosovo, Turquía y Mozambique, entre otros escenarios, que son de pacificación o de ayuda humanitaria, dieron nuevos cometidos a los militares y resultaron determinantes para que, por primera vez, el conjunto de la sociedad civil valorase positivamente su labor. Sin embargo, el apoyo unánime a las misiones en el exterior, en la ciudadanía, los medios de comunicación y la clase política, ha quedado roto a partir de la operación en Irak.