Personaje destacado de El Camino de Santiago es el camino de la vida (1998), tercer libro del autor de El jardinero (best seller internacional, con más de veinte ediciones en castellano), el peregrino loco es un sabio extraño y marginal que recorre la Ruta Jacobea desconcertando con sus ideas a peregrinos, hospitaleros y lugareños. Versión errante y enloquecida del célebre Nasrudín, protagonista de muchos cuentos del misticismo sufí, el peregrino loco es un personaje entrañable, que consigue poner en evidencia los absurdos de nuestra sociedad y de nuestra propia manera de pensar y de ver la realidad; todo ello desde una actitud ácida, burlona, aguda y socarrona, que gusta de la ironía y de la sátira, de la bufonada mordaz y corrosiva, y del equívoco.
En 52 breves fragmentos, que se sitúan a todo lo largo del Camino de Santiago, el autor nos lleva de la mano de su demencial personaje para señalarnos, con un estilo no exento de humor, las incongruencias y los sinsentidos en los que fundamentamos nuestra existencia, y que sólo un loco, alguien que ha roto con los convencionalismos y las normas del «sentido común», puede resaltarnos y hacernos ver.
El peregrino loco es un libro que le entretendrá y le hará pensar, que le seducirá y le hará reír, para terminar al fin tomándole cariño a su peculiar protagonista, personaje solitario, sabio e incomprendido. Ésa será la señal de que la locura divina ha comenzado a hacer mella en su alma pues, como dicen los sufíes, la sabiduría de Dios es locura para los hombres.