Las novelas de Dostoyevski parten de una experiencia vivida dramáticamente y que el autor transforma magistralmente en una ficción que no deja de ser siempre un trasunto de la realidad. Este realismo es el que caracteriza a El adolescente, novela que tiene como principal protagonista a un joven ruso que admira u odia a su padre según las influencias contradictorias que recibe.
La vida del adolescente y de un retablo de personajes, maravillosamente caracterizados por Dostoyevski, que bullen en torno a él, va creando un crescendo en la novela, que es lo que mueve al lector a no abandonar la lectura hasta la última página. El adolescente hace de su “yo” el centro del mundo y fantasea sobre una felicidad universal, sin luchar por conseguir la suya propia.